El burnout o agotamiento por la diabetes es un estado de agotamiento físico, emocional y mental que pueden experimentar las personas con diabetes (tanto tipo 1 como tipo 2) debido a las constantes demandas del manejo de la diabetes. El agotamiento por la diabetes es común y a menudo se malinterpreta. Esto es lo que las personas con diabetes deben saber:
¿Qué es el agotamiento por la diabetes?
El agotamiento por la diabetes es un estado que involucra sentimientos de frustración y desesperanza. En algunos casos, las personas se alejan de las actividades que necesitan para su autocuidado. Las personas pueden dejar de medir sus niveles de glucosa en sangre, administrar insulina o seguir planes de alimentación y de actividad física.
¿Cuáles son las causas?
Hay varias razones por las cuales se presenta el agotamiento por la diabetes y todas se relacionan con la naturaleza de la vida con diabetes. Manejar la diabetes requiere vigilancia continua (medir los niveles de glucosa en sangre, leer etiquetas, contar carbohidratos, etc.) Además, la presión de manejarla bien, junto con el miedo a las complicaciones, puede provocar estrés y fatiga.
El manejo de la diabetes también es un esfuerzo a largo plazo y a veces puede parecer que nuestro arduo trabajo no está dando resultado, especialmente cuando los niveles de glucosa en sangre fluctúan por razones fuera de nuestro control.
Por último, vivir con diabetes puede sentirse aislante, especialmente cuando creemos que los demás no entienden completamente la carga diaria de nuestra condición.
¿Cuáles son los signos del agotamiento por la diabetes?
- Niveles de frustración elevados, irritabilidad o falta de motivación para el cuidado de la diabetes.
- Dejar de medir los niveles de glucosa en sangre, dejar de tomar medicamentos u omitir dosis de insulina.
- Sentirse abrumado o ansioso por las tareas relacionadas con la diabetes.
- Pensar “¿para qué hago todo esto?” o sentir que nada de lo que hagas mejorará tu salud.
Cómo lidiar con el agotamiento por la diabetes
- Valida y reconoce tus sentimientos: La diabetes es exigente por naturaleza y esto significa que el agotamiento es comprensible y no eres la única persona que se siente así.
- Busca apoyo: habla con tu profesional de la salud, un terapeuta o un educador en diabetes sobre cómo te sientes. Los grupos de apoyo o las comunidades en línea pueden ayudarte a conocer y hablar con otros que pasan por desafíos similares.
- Tómate un descanso (dentro de lo razonable): está bien tomarse un descanso mental. Pide ayuda a familiares o amigos para compartir parte de la carga, o usa herramientas (aplicaciones o dispositivos) para automatizar algunas tareas relacionadas al manejo de la diabetes.
- Centra tu atención en pequeños logros: establece metas pequeñas y alcanzables para recuperar la sensación de logro.
- Ayuda profesional: si el agotamiento persiste, la consejería o trabajar con un equipo de atención de la diabetes puede ayudar a abordar problemas emocionales o psicológicos más profundos.
Prevención del agotamiento
- Enfoque equilibrado: trabaja para alcanzar los objetivos establecidos por tu médico, pero trata de evitar el perfeccionismo. Recuerda que las fluctuaciones en los niveles de glucosa en sangre ocurren y no todo está bajo tu control. De hecho, hay más de 40 factores que tienen impacto en los niveles de glucosa en sangre; aquí te compartimos algunos de ellos
- Construye una rutina que se adapte a tu vida: adapta tu manejo de la diabetes a tu estilo de vida. Así sentirás que es una carga menor, por ejemplo, trabaja con un educador en diabetes para crear un plan de comidas que te guste.
- Practica la autocompasión: sé amable contigo mismo, especialmente cuando las cosas no salen como deberían. Recuerda que estás haciendo lo mejor que puedes.
- Comunícate: no dudes en hablar con tu médico sobre el agotamiento. Tu médico puede realizar ajustes en tu tratamiento, ofrecerte nuevas estrategias o guiarte hacia recursos de salud mental. Haz saber a tus seres queridos cómo te sientes, para que puedan apoyarte o quitarte algo de presión.
El agotamiento por la diabetes es un fenómeno real y una experiencia común, que es importante abordar para mantener tanto la salud mental como física. Buscar apoyo y ajustar nuestras expectativas (cuando sea necesario) puede marcar una gran diferencia.